(El Periódico – 16-06-2022) Después de superar movilizaciones vecinales, ataques contra el edificio patrimonial del Concejo Municipal e incluso amenazas de denuncias de por medio, el pleno del Legislativo aprobó y sancionó este miércoles la ley de condonación del 50% de multas para construcciones clandestinas.
El proyectista, Ervin Mancilla Olarte, agradeció el desprendimiento de los concejales para apoyar esta iniciativa, que consideró ayudará a “ordenar” la ciudad y también colaborar en la economía de los vecinos que deben pagar altos montos de dinero para regularizar la situación de sus bienes inmuebles luego de haber realizado modificaciones sin solicitar el aval de la Dirección de Ordenamiento Territorial (DOT).
“Me siento muy contento, a veces no se da las cosas al 100% pero que haya habido una rebaja de 10, 20, 30, 40 o el 50% ya gana la población, esta vez hemos ganado la mitad, el que tenía que pagar 20 hoy va a pagar 10, el que tenía que pagar 1,000 bolivianos ahora pagará 500. Espero que los dirigentes y las juntas vecinales entiendan que ha sido una lucha muy fuerte, pero hemos ganado porque se ha dado la rebaja”, argumentó.
Asimismo, tomando en cuenta el tiempo de vigencia que tendrá la ley, opinó que los profesionales independientes dedicados al campo de la construcción y ordenamiento urbano, generarán ingresos al prestar sus servicios a los ciudadanos que pretendan acogerse a este beneficio.
Por su parte, el presidente en ejercicio del Concejo, Alberto Valdez Rojas, indicó que esta cifra de descuento surgió del consenso tanto de las juntas vecinales, el Gobierno Municipal en su conjunto y el control social.
ElAPUNTE
Un proceso accidentado
Para abordar la socialización del proyecto de ley de construcciones clandestinas, el Concejo Municipal conformó una comisión presidida por Alberto Valdez, dicha instancia hizo conocer que solo se podía aprobar un descuento del 50% y eso generó la molestia de vecinos que atentaron contra el edificio del Legislativo, tomando como rehenes a más de 60 funcionarios y también a los propios concejales.