Chuquisaca y Potosí están en una situación grave. Santa Cruz está con un indicador alto.
(Página Siete – 17-11-2022) Bolivia tiene el tercer índice más alto de hambre de Sudamérica, según el Índice Global de Hambre (IGH) 2021. Esta situación -según este informe- destapa una desigualdad en el acceso a la alimentación y la falta de ingresos de las familias. Además, el estudio indica que Potosí y Chuquisaca están en una situación grave.
El director del Programa Helvetas, Richard Haep, explicó a Página Siete que este informe sobre el IGH se publica desde 2006 en diferentes países, pero en el caso de Bolivia se hace por primera vez.
Este informe, que será presentado hoy por Ayuda en Acción, Helvetas Bolivia y Welthungerhilfe, miembros de Alliance 2015, analiza el hambre expresado por diferentes indicadores: la desnutrición crónica infantil, la desnutrición infantil aguda, la mortalidad infantil y la deficiencia calórica en la población.
Explicó que el IGH tiene una escala de 0 a 100, es decir de 0 a 9,9 es considerado bajo, de 10 a 19,9 es considerado moderado, de 20 a 34,9 es grave, de 35 a 49,9 es alarmante y extremadamente alarmante es de 50 a 100.
De acuerdo con el informe del IGH, Bolivia se encuentra en una posición moderada, porque llega a 13,2. Pero, es el tercer país con un índice elevado de hambre de Sudamérica, ya que primero está Venezuela con 19,9 y segundo está Ecuador con 15, 2.
Según el reporte, los países con índices bajos son: Brasil con 5,4, Argentina con 6,8 y Perú con 7,6.
Haep aseguró que la valoración se realizó con 21 países de América Latina y de ellos, Bolivia ocupa el puesto 15. “Mejoró su situación en los últimos 25 años e incluso ha reducido casi a la mitad”, destacó.
Sin embargo, Haep explicó que esta mejora no se da para todos los bolivianos, porque Potosí alcanzó 23,8 puntos y Chuquisaca registró 23,3, es decir que ambos “se encuentran en una situación grave”.
Aunque resaltó que Santa Cruz sí está con un indicador “bajo”, ya que alcanzó 5,5. Beni también está en este grupo con 7,8.
El resto de los departamentos Oruro (13,7), Pando (13,1), La Paz (11,3), Cochabamba (11,3) y Tarija (10,1) están en una situación moderada.
De acuerdo con Haep, esa brecha que existe entre los departamentos también se observa entre la parte urbana y rural. Esta última es la más afectada.
Resaltó que además se hizo una valoración entre las áreas del altiplano, valle y llano, donde el último tiene un nivel bajo con 9,4, el valle con 14,2 y el altiplano con 16,4. “Eso significa que a pesar de los programas que el Estado ha implementado, como el Bono Juana Azurduy y el pago del Subsidio Prenatal, no ha logrado llegar con esos programas de apoyo a esa parte de la población que requiere medidas especiales”, indicó.
Agregó que es importante contar con datos actualizados para erradicar el hambre en esas “comunidades”.
Explicó que los primeros 100 días de vida del bebé definen cuáles serán las capacidades del niño. “Si en ese tiempo no se alimenta bien, vamos a tener un impacto fuerte en sus capacidades”, sostuvo. Resaltó que la alimentación es un derecho humano y el Estado es el garante de que se cumpla.
Por eso, según el especialista, es importante que se adquieran alimentos con calidad y no sólo carbohidratos, como frecuentemente se consumen. “A muchos en su alimentación les faltan micronutrientes y proteínas, vitaminas, minerales y eso es importante para el desarrollo de cada niño”, aseguró. Indicó que en Bolivia existe un 14% de desnutrición crónica.